5.1.10

Estoy en Leipzig y hoy es la primera reunión de equipo durante el nuevo año 2010 que recién comienza. Son las 9:30 de la mañana. No me queda mucho tiempo aquí. Mi trabajo como Trainer y consejero intercultural para Empowerment con jóvenes y adultos inmigrantes en Alemania ya pronto llega a su fin.

Hoy es un día muy bonito. Hay nieve en toda la ciudad y este año me he propuesto vivir “el presente” y “concretizar” más. Aquí y ahora quiero “disfrutar” los días que me quedan en este Proyecto Piloto y la oportunidad que me ha dado el “Tao” para aprender de esta experiencia profesional en la antigua RDA.

Hemos comenzado la reunión de “equipo” con una pequeña ronda de compartir algo personal sobre el pasado tiempo de navidad y año nuevo.

Yo he hablado hoy de mi ex compañero de lucha Toño Román como un pequeño homenaje a la distancia. Conté a mis colegas alemanes de su personalidad, su sonrisa y actitud, y el rol que él jugó como dirigente juvenil y como miembro de la generación del 80’ y el impacto que su suicidio provoco entre muchos de quienes tuvimos oportunidad de conocerlo.

Fuente: La foto la tomé de un archivo que a fines de 1999 una colega del Ministerio de Salud me regalo antes de partir de Chile, con algunas fotos viejas del movimiento estudiantil chileno. "Los Búfalos Azules". Realización Claudia Valle; Carolina Lopez. Fotografía; Migue Carrasco. Colaboradora Claudia Zamora. Para todos ellos un saludo de gratitud y r econocimiento.

Además comenté, sobre la importancia de estar vivo. Y el significado de la muerte. Lo frágil y efímera que es la vida. Y la importancia de disfrutar de este momento presente.

Este fue un pequeño y modesto homenaje a mi amigo Toño Román de Chile. Y que yo quise transmitir hoy a mis colegas aquí en Leipzig en un territorio que alguna vez tuvo mucho significado político para una parte importante de la izquierda Chilena esa generación.

Este texto es un extracto de mi diario de Vida en Alemania. En un día soleado y Nevado en la ciudad de Leipzig.

La Nieve se derrite lentamente como la memoria de lo que un día se llamó DDR.

Pronto todo se habrá evaporado como la lagrimas que muchos hemos dejado en el camino por amigos y compañeros que ya no están.

Para todos ellos, que han cruzado la última frontera, un saludo fraterna a la distancia.

¡Hasta la Victoria Siempre!

¡Compañero Tono Román!

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